Cocodrilos se defiende con las uñas ante un agresivo Gaiteros
Jugando mal también se gana
Nelson Contreras Suárez
Muchas veces no es necesario tener un grupo de jugadores solventes, bien preparados, si al final los resultados no son los esperados, mientras que solo basta reunir a un grupo de atletas que tienen la voluntad, la garra y sobre todo el factor suerte a sus espaldas, para llevarse las victorias. Eso, es justamente, lo que ha mostrado en los tres juegos que ha realizado en la campaña 2009 de la Liga Profesional de Baloncesto, el club Cocodrilos de Caracas que la noche del jueves acabó con el invicto de Gaiteros del Zulia, en una revalidación de la gran final de la temporada de 2008.
Y es que el quinteto saurio de nuevo jugó, en su casa el Parque Naciones Unidas, por ráfagas, tal y como lo hizo en la división de honores que dejó ante su fuerte enemigo el repotenciado Panteras de Miranda.
En esta oportunidad tuvo al frente a un rival que como Gaiteros del Zulia parece tener mucha profundidad en la cancha, pero todavía no han logrado cohesionarse y por distintas grietas dejan abierto el camino para cargar con las derrotas.
Cocodrilos gana porque le saca brillo a la velocidad. Esa es su arma principal, Aunque por momentos lucen atropellados, pero dependen del efectivo trabajo de sus criollos, encabezados por Luis Bethelmí, Henry Centeno, Juan Herrera y Henry Páez quienes se convierten en un verdadero torbellino ante sus contrarios.
Con esa arma el director técnico Néstor "Mama Osa" Salazar logró zafarse de un adversario que le puso empeño, que por momentos se mostraba sobrado, que juega casi al mismo ritmo de la velocidad que marcan los capitalinos, pero que igualmente cometen fallas garrafales, incluso algunas que están fuera de lugar, como la que realizó Alejando "Tapipa" Barrios al manotearle la cara a Jason Crowe para salir expulsado del encuentro, con lo cual además, sentenció, virtualmente, la derrota de su equipo.
Cocodrilos, en su tercer juego de la campaña mostró que sus jugadores importados Jason Crowe, Eddie Elisma, pitados a rabiar por los fanáticos del club, al final como remordidos en su amor propio, se levantaron y en el último cuarto realizaron varias jugadas importantes como para decirle a los aficionados: cuenten con nosotros que si somos capaces de mantenernos en el equipo.
Pero fueron más los pitos y las repulsas de la afición que lo que pudieron mostrar estos dos foráneos. El comunitario dominicano Elisma, de nuevo, demostró que a pesar de su elevada estatura no cuida con eficacia y en forma sostenida la defensa sobre el perímetro, mientras que el piloto Crowe mueve el balón con mucha velocidad, pero lo hace muchas veces en forma alocada, no coordina los pases o parece que sus compañeros no sabe para dónde dirigirá las asistencias. Así es difícil, aunque lo poquito que mostraron en este juego ante Gaiteros da pie para pensar que posiblemente tienen la capacidad para ayudar al conjunto reptil.
Gaiteros vuelve este año con muchos bríos, claro todavía no han alcanzado el más efectivo nivel técnico, pero los musicales se las traen. La llegada del "Tapipa" Barrios les aportará excelentes beneficios, al igual que Rafael Guevara, ya más curtido de baloncesto y por ende una de las bazas fundamentales de esa organización. Oscar Arteaga con sus precisos disparos de larga distancia, también le concede al club occidental profundidad.
Mientras que el veterano Askia Jones, demuestra que todavía tiene mucho que ofrecer en nuestra liga, en su condición de alero que con velocidad y buena puntería desubica a la defensa contraria, en tanto que Leiner Zerpa atrae mucha marca y juega con inteligencia.
De los importados del bando zuliano, es bueno precisar que Thomas Burroughs es un fajador debajo de los tableros. Posee el don de saber penetrar a la zona del ataque en la zona de la pintura, llevándose las marcas y llenando de faltas a los contrarios que tratan de detenerlo, por lo que es un jugador clave esta campaña para los furreros.
No se puede decir lo mismo del piloto dominicano Joel Ramírez, pues no tiene las condiciones para aportar dividendos a este club mientras que el tercer jugador importado, el estadounidense Rob Sanders, aunque estuvo apagado en el choque contra los capitalinos, ya mostró su valía al ser declarado por la Comisión Técnica como el Jugador de la Semana, en el inicio de la temporada.
Para culminar no podemos dejar fuera el desastroso papel que cumplieron los árbitros en este encuentro. Los tres soplapitos parece que estaban en otro encuentro, pues no pegaron una.
La LPB debe esforzarse por evaluar mejor el trabajo de estos señores, pues un día de estos van a causar un zaperoco cuando el público reaccione ante sus imperfecciones. Esta bien que fallen una dos y hasta tres veces, pero que cometan mas de 15 y 20 ya es el colmo.
Volveremos muy pronto.
