GUAIQUERIES PEGA DÓNDE MÁS DUELE
Ya no son cuentos de caminos: Guaiqueríes de Margarita demostró la noche del miércoles que está para grandes cosas en la presente campaña de la Liga Profesional de Baloncesto, tras sacudirse de Cocodrilos de Caracas por 70-72, apelando a su juego de velocidad, sólida defensa y poder en los tableros ante un rival que en su casa el Parque Naciones Unidas de El Paraíso, es muy difícil de derrotar.
Empero todo no es color de rosas para el quinteto capitalino, que a pesar de mostrar su capacidad para remontar una pizarra que le desfavorecía abiertamente hasta por más de 10 puntos en el último cuarto, en los segundos finales no pudo marcar el canasto de la igualada y todo porque siguen insistiendo en el juego alocado, impreciso, y sin coordinación, sobre todo en los momentos de apremios.
Esos factores negativos no los desaprovecha el conjunto insular, que en base a un esquema de juego de mucha solvencia defensiva y velocidad, encabezado por el dominicano Kelvin Peña, llamado el Pollito, no queda, sino abrirle paso a este conjunto a las victorias.
La tropa de Margarita cuenta además con ese general de los tableros que es Roger Washington, quien sin estar al cien por ciento de su capacidad física y técnica, se erige como el líder del equipo al momento de plantear la pelea en los rebotes, de atacar o de plantear una agresiva forma de marcar a un pívot contrario.
A su lado el tachirense Hebert Bayona, está más efectivo que nunca. Ya su juego no es solo netamente defensivo, aunque ese es su punto fuerte, sino que ataca con mucha capacidad y a pesar de que comete muchas faltas, como en este juego en el que salió por cinco personales, sabe distribuirse en el tabloncillo para asumir un papel destacado en el equipo de la Isla, especialmente por su elevada estatura, algo difícil de conseguir en nuestra Liga.
Cocodrilos, con Juan Herrera, se crece por momentos. Este jugador se desenvuelve cada vez mejor, aunque en ocasiones luce desorientado, sin brújula y eso es perjudicial para él y para su club. Todavía le falta aumentar y mantener su ritmo de juego y moverse en el terreno, sobre todo cuando trata de meterse en la lucha debajo de los tableros.
Por el Caracas, Jason Crowe sigue aportando mucho y su paisano estadounidense, Tim Johnson lo hace en forma precisa. Ambos son excelentes movedores de pelota, atenuando un poco su trabajo en la cancha debido a sus bajas estaturas, mientras que el comunitario dominicano Elisma, no termina de cuajar, especialmente a la ofensiva, aunque se defiende bien el perímetro de la pintura.
En líneas generales estos dos equipos prometen muchas batallas y son candidatos a meterse en la postemporada, aunque para lograrlo les queda a sus técnicos mejorar muchos detalles tácticos para lograr ese primer éxito de la campaña basquetera. Lo demás es buscar el título y eso sólo se logra con buenos equipos.
