Los grandes consorcios como Mercedes, Toyota y Renault amenazan con irse el próximo año o antes del Gran Circo de la velocidad, debido a los problemas económicos que golpean la industria de los motores. Sin embargo, las escuderías Lola y Podrive aguardan con impaciencia para entrar a competir
Nelson Contreras Suárez
Cada día son más fuertes los rumores en torno a la desaparición de la Fórmula Uno de las escuderías Toyota y Renault, junto a la Mercedes, derivado de la intensa dificultad que mantiene el mundo la industria automotriz en todo el mundo, motivado a la crisis financiera. Sin dudas, la salida de esos equipos representaría la perdida de tres de los más grandes inversores y animadores de la fiesta de los motores, con lo cual lógicamente se perdería, igualmente, tres industrias que han dejado huella de avance para el apasionante mundo de la velocidad.
Sin embargo, la posible salida de estos tres grandes permitirá la entrada de dos nuevas y promisorias escuderías que esperan desde hace tiempo el chance, pero no había cupo. Ellas son Lola y Podrive que ya tienen listos sus prototipos y los deseos de pelear, aunque con menos capital que el de las grandes empresas hoy a punto de abandonar.
"No veo amenazada la existencia de la Fórmula 1. Pero quizá habrá grandes cambios", dijo en Sakhir el piloto de BMW Nick Heidfeld, según lo señala una información cablegráfica de la agencia AFP, originada esa ciudad, donde se disputará este fin de semana el GP de Bahrein.
La situación se plantea tras el anuncio de Hemunt Lense, jefe de prensa del sindicato de constructores de coches, quien explicó que en un tiempo relativamente corto no van a poder seguir afrontando los enormes costos de participación en la Fórmula Uno, por lo que considera que está en duda la futura participación del consorcio en los Grandes Premios.
"La Fórmula 1 no tiene aceptación entre los empleados. Y hay que tomar nota de eso", dijo Heidfeld quien no cree que existan esas intenciones en BMW. "No soy ningún vidente, pero creo que nuestra empresa no está en la Fórmula 1 para quemar dinero, sino porque está convencida de que ello es propaganda para nuestra marca", dijo el alemán, agregando que la crisis económica afecta a todos, y no sólo al circo.
Rosberg: 'Mercedes debe seguir en la F1'
Rosberg mostró su molestia ante las sugerencias de que los consorcios automovilísticos alemanes se retiren de la Fórmula 1. "Es mas que sorprendente oír semejantes cosas. Mercedes debe seguir en la Formula 1", enfatizó el piloto, que reconoció que hay que seguir rebajando los costos para que las empresas no pongan reparos. Heidfeld, en vista de la crisis, estima que los costos, reducidos ya drásticamente, seguirán forzosamente descendiendo.
"El mercado regula eso. Y eso rige también para los sueldos de los pilotos, aun cuando, naturalmente, nadie acepta gustoso una reducción", dijo el conductor de 31 años. "La oferta y la demanda deciden".
Mercedes posee el 40 por ciento de las acciones de McLaren. La empresa de Stuttgart suministra motores a BrawnGP y Force India, aparte de a su socio británico de largo años, con el que consiguió numerosos títulos mundialistas. "Mercedes encabeza la clasificación del Mundial", citó Rosberg otro argumento de marketing para la permanencia del consorcio en la Fórmula 1.
OTROS DOS GRANDES A PUNTO DE IRSE
Entre tanto, Toyota y Renault desde hace tiempo son candidatos a seguir a los japoneses de la Honda que renunciaron antes de comenzar la presente campaña.
"La Fórmula 1 es valiosa para BMW", dijo el jefe de motores, Mario Theissen. De modo similar argumenta el jefe de motores de Mercedes, Norbert Haug, quien opina que la inversión en las 'flechas de plata' valió totalmente la pena para el constructor de automóviles.
También para otros consorcios automovilísticos, aparte de Daimler, los dispendios de millones por la Fórmula 1 hace ya tiempo que son objeto de discusión. El jefe de equipo de Toyota, Tadashi Yamashina, tuvo que esforzarse para convencer a la directiva del consorcio de que no siguiera el ejemplo de Honda.
"Nuestros negativos datos económicos sembraron dudas al parecer", dijo hace poco Yamashina. Sólo a cambio de prometer masivos ahorros la jefatura de Toyota dio "luz verde" para el equipo.
El jefe del consorcio Renault, Carlo Goshn, quiere ahorrarle gastos a su empresa, y espera nuevos éxitos del equipo del doble campeón mundial Fernando Alonso, a fin de poder justificar el costoso proyecto Fórmula 1.
Para colmo, el banco ING holandés, sacudido por la crisis, anunció que se despide a fin de año de su papel de patrocinador principal de la Renault.
Lola y Podrive, aguardan
El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Max Mosley, planea al parecer hace ya tiempo una Fórmula 1 sin los grandes consorcios automotrices, asegura el cable de la agencia de noticias alemana DPA.
La idea de Mosley tuvo aparentemente éxito. El miércoles, el equipo británico Lola reveló sus planes de volver a la Fórmula 1. Al día siguiente el equipo inglés Podrive anuncio también su interés. Las propuestas de la FIA podrían conducir a que "la Fórmula 1 vuelva a su fundamental ética de tener éxito con la mayor riqueza inventiva y la mejor organización, y no con el presupuesto más elevado", dijo el jefe de Podrive, David Richards.
"Esto me parece lamentable. Estamos viviendo una muy interesante situación en la Fórmula 1. Hay que conocer dónde están los límites, hasta qué punto se puede llegar y en dónde hay que tener cuidado", dijo el ex monarca Michael Schumacher.
